¿Recuerdas como eran los coches hace 100 años? ¿Y los ordenadores? ¿Y el primer teléfono? Si echamos
la vista hacia atrás mucha de la tecnología que se usaba en la época nos causa incluso risa a día de hoy, ya
que ha quedado completamente obsoleta frente a los dispositivos y maquinaria que usamos en la
actualidad.
Sin embargo muchas de las herramientas que se emplean hoy en seguridad ciudadana no son los modelos
más modernos a pesar de que el sector está en constante evolución… Si pensamos en elementos que
diferencien a este gremio respecto de otros, probablemente venga a nuestra mente la clásica pistola
policial. Beretta, Glock o H&K son marcas insignia de tipo de arma, compartiendo en muchas ocasiones
su sistema de puntería; con un alza y un punto de mira. Exactamente el mismo alza y punto de mira que
hace 100 años… ¿por qué no nos reímos en esta ocasión?
La solución tecnológica pertinente no debe sorprender a nadie que se amante de este mundillo. Y sí, como
podéis suponer, hablamos de los visores de punto rojo. Son muchas las opciones en el mercado, ¿pero
cuales son las más fiables? ¿En cual debería confiar nuestros FFCCSE?
Basándonos en el estudio realizado durante los últimos 7 años por Sage Dynamics “Miniaturized Red Dot
Systems for Duty Handgun Use”, trataremos de analizar y explicar cual de las opciones del mercado
actual es la más recomendada para su uso en FFCCSE, y en próximos artículos profundizaremos en
cuales son las ventajas de usar este tipo de dispositivos.
Lo primero que nos muestra el estudio (y el tema principal de este artículo) realizado por la empresa
americana es, en términos tecnológicos y de diseño, cual de las marcas presentes en el mercado es de
mayor fiabilidad.
Antes de comenzar los test, se realiza una importante indicación. Quedan descartados los visores con
montura externa (y que no permiten que el arma sea enfundada en una funda adecuada con un visor), y
aquellos que deben accionarse manualmente (mediante un interruptor on/off) ya que no son aceptables
para un uso de servicio policial o militar.
Habiendo realizado este primer filtro, el estudio comienza con 4 pruebas que probarán la resistencia y
desempeño de los visores en los siguientes escenarios: caída desde altura de empuñado (desde la altura
del hombro y cada 500 proyectiles disparados), impactos (que pueda recibir el visor durante una
manipulación habitual en servicio del arma), elementos ambientales (congelada a -1oC, calentada a 65oC,
y sumergida a 30 cm en agua a temperatura ambiente cada 500 proyectiles disparados), y número de
disparos totales (hasta presentar fallos).
Tras haber realizado estas pruebas, podemos clasificar los visores en 3 grupos en función de su
rendimiento.
El primer grupo consta de los modelos cuyo rendimiento no se considera adecuado para un uso policial o
militar. Dada su baja resistencia no se recomienda su uso, ya que dejan de funcionar o sufren daños graves
habiendo disparado menos de 1000 proyectiles. Los modelos que componen este grupo son Burris
Fastfire II y III, C-More STS, Sig Romeo 1, Browe Micro Reflex y Eotech EFLX.
A continuación, el segundo grupo se constituye por aquellos modelos que superan los 1000 proyectiles
disparados bajo un rendimiento adecuado. Sin embargo, aun superando un número significativo de
disparos, mostraban algún fallo no asumible para un uso de servicio. Este grupo es más amplio, siendo 9
los modelos que lo forman. Estos son Insight MRDS, Docter Sight II, Vortex Venom 3, Vortex Viper 6,
Leupold Delta Point Pro, Leupold Delta Point Micro, Trijicon RM09, Sig Rome 1 Pro y Swampfox
Justice. Podemos considerar este grupo como los modelos adecuados para un uso recreativo, pero
desaconsejados para FFCCSE.
Finalmente, el tercer grupo lo forman aquellos modelos cuyo rendimiento se puede considerar óptimo y
adecuado para su uso policial y militar dada su alta resistencia y desempeño bajo las condiciones establecidas.
Aquí encontramos modelos que han sufrido algún daño considerable tras un gran numero de
disparos, o que directamente no han presentado ningún fallo o desperfecto. Los modelos que presentaron
fallos tras, al menos 10.000 disparos, son Holosun 507C 2 y Aimpoint ACRO P-1.
Los modelos que aun habiéndose enfrentado a las condiciones establecidas y tras haber disparado más de
10.000 proyectiles (algunos modelos no superan esa cifra de disparos dado su reciente lanzamiento al
mercado y la imposibilidad de realizar más test antes de publicar el estudio, y algunos otros incluso
superando los 30.000) no han reportado ningún fallo desde el comienzo del estudio son Trijicon RMR
RM06, Trijicon RMR RM07, Trijicon RMR RM09, Holosun 508T V2, Holosun 509T V2, Holosun SCS,
Holosun EPS, Steiner MPS, Sig Romeo 2 y Aimpoint ACRO P-2.
A este último grupo de visores se decidió realizar un estudio más fidedigno y aterrizado a una situación de
servicio. Esta parte excepcional del estudio se realizó gracias a la colaboración de 1.100 instructores de
tiro con visor de punto rojo, con una muestra aproximada de 11.000 armas de servicio. Una vez más los
modelos de Holosun y Aimpoint fueron aquellos que mejor rendimiento ofrecieron y que un menor
número de incidencias reportaron.
Por ello, podemos concluir que los visores que mayor rendimiento y fiabilidad reportan son los de las
marcas Holosun y Aimpoint. Sin emabargo, a efectos prácticos resulta una mejor opción algunos modelos
de Holosun debido a su retícula secundaria adicional al punto rojo estandar. Esto permite al operativo un
apuntado y centrado del objetivo más rápido e intuitivo sin perder la referencia espacial del entorno.
En siguientes entregas ahondaremos sobre el funcionamiento a nivel psicofísico y técnico de estos
dispositivos, sus ventajas y posibles situaciones adversas de uso y como afrontarlas.
Desde Saborit velamos por la seguridad y eficiencia de nuestros FFCCSE, por lo que consideramos
interesante la propuesta de introducir los visores de punto rojo como una herramienta más del día a día de
estos.
Para más información, no dudes en contactar con nosotros por correo electrónico (saborit@saborit.com) o
por teléfono (+34 686 96 91 21).